POEMA EN SAN VALENTÍN
Tu recuerdo me vive a su albedrío.
Hoy levanta ante mí mi propia imagen
feliz cuando contigo:
es un fantasma ilusionado, alegre,
que me sale del cuerpo
y abraza tu recuerdo, y enlazados
bailan en el espacio de la vida,
en ese espacio hueco donde habito
desde que por razones racionales
llevé a cabo los actos rigurosos
de cortar y arrancar
y echar a andar sin voltear el rostro,
para dejar atrás lo inconveniente.
Pero mi corazón, torpe animal,
sin comprender por qué se lo llevaban
como si nada grave aconteciese,
se volteó en su jaula de costillas
para ver a su amor permanecer
de pie, tras un portón,
en una calle ingrata, para siempre.
Piedra de sal no me volví, del todo.
Pero mi bruto corazón
piedra de sal se hizo en ese instante.
Por eso es que a pesar de tantos años,
boto sal por los ojos
pruebo sal en la boca
trago sal,
cuando en atardeceres soleados,
o mañanas lluviosas, o noches estrelladas,
en el espacio hueco que es mi vida
baila un fantasma alegre, ilusionado,
con tu recuerdo vivo.
Y yo los miro.
Los sufro con paciencia.
Los perdono.
PRÓLOGO
Cuán pronto se apresura, habilidosa,
la araña hacia la tierna mariposa
que aletea en la red del pensamiento.
Ya captura, ya pica, ya amortaja
su vivo sentimiento
para futuro espiritual sustento.
Y ese brillo que adorna, adamantino,
la red vulgar no es lágrima. Es rocío.
Las arañas no lloran, amor mío.
FÁBULA
Pobre princesa,
se equivocó de sapo.
HOBBY
Colecciono
pequeños desencantos.
Por ejemplo,
llamadas telefónicas.
1 comentario:
"...cuando en atardeceres soleados,
o mañanas lluviosas, o noches estrelladas,
en el espacio hueco que es mi vida
baila un fantasma alegre, ilusionado,
con tu recuerdo vivo..."
sin palabras, simplemente precioso.
pd. yo algún día tb coleccionaré llamadas, de momento sigo con mis posavasos
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