Altamente recomendable a pesar de su simpleza argumental. Deja grandes reflexiones sobre la vida diaria que te llevas en el bolsillo del recuerdo.

Y estabas allí sentada, no destacabas, eras una tía más... ¿por qué tuviste que mirarme? Desde entonces persigo tu mirada a cada hora, vivo obsesionado con abrazarte, tengo el cuerpo atravesado de deseo al ver tus ojos.