Hace dos viernes tuve la suerte de asistir invitado al recital de la Ética poética de la siempre genial María Ruíz Faro que una vez más nos alumbró con su sabiduría cotidiana. Lo que más me gustó:
ConfidenciasMe equivoco demasiado,
alguna gente ya lo sabe,
cuento los secretos.
Me asfixio cuando me devoran
los nervios.
Me enamoro a la primera,el deseo guía nueve de los
diez pasos que doy
y tengo miedo de ir tan lejos
cuando todos se quedaron contentos
con sus cosas cotidianas
y a mí esas cosas no me dicen nada.
Hacer lo que me mandanMe han prevenido contra ti
me han dicho que me ande con pies de
plomo
que no me meta
que eres veneno
que voy a sembrar tristeza
y a recoger toda la pena
que se puede cosechar de un golpe.
Me han dicho
tantas cosas como para huirte
cuando me cruce contigo
pero no sé qué pasa
a cada consejo por alejarme de ti
le siguen unas ganas terribles de follarte.Nunca, nunca serví para hacer lo que me mandan.
Y mañana viernes, otra sesión de poesía por los antros sevillanos...
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